En esta vida todos los días tenemos que estar tomando decisiones unas más importantes que otras, tan importantes que pueden determinar nuestro presente y nuestro futuro. Pocos son los que reflexionan acerca de lo importante que es tomar una decisión. Cuando estás tomando decisiones estás usando tu poder de elegir, tu capacidad de cambiar o transformar aspectos de tu vida. Las decisiones que tomes pueden hacer que te sientas alegre o triste, feliz o enojado, libre o atado.
Una decisión puede cambiar tu vida. Tomarla implica dirigirte hacia un nuevo lugar en el que puedes encontrar dicha y crecimiento pero, también pueden generarte problemas y hacerte infeliz cuando van en contra de lo que es importante para ti. Otras pueden generarte tristeza, pero quizás es la mejor.
Cada día necesitamos tomar decisiones de carácter sentimental, económico, familiar. Etc. La vida está basada en decisiones.
En la toma de decisiones es muy importante no dejarse influenciar por las circunstancias. Belén significa casa de pan y a pesar de eso estaba pasando por momentos de dificultad, Había hambre. Esto hiso que Noemí y su familia tomaran una mala decisión. V 1 “Aconteció en los días que gobernaban los jueces, que hubo hambre en la tierra. Y un varón de Belén de Judá fue a morar en los campos de Moab, él y su mujer, y dos hijos suyos.”
Cuando estamos desesperados no vemos ni valoramos lo que tenemos. Bien dice el adagio: “nadie valora lo que tiene hasta que lo pierde” V 20-21 “Y ella les respondía: No me llaméis Noemí, sino llamadme Mara; porque en grande amargura me ha puesto el Todopoderoso.
1:21 Yo me fui llena, pero Jehová me ha vuelto con las manos vacías. ¿Por qué me llamaréis Noemí, ya que Jehová ha dado testimonio contra mí, y el Todopoderoso me ha afligido?”
1:21 Yo me fui llena, pero Jehová me ha vuelto con las manos vacías. ¿Por qué me llamaréis Noemí, ya que Jehová ha dado testimonio contra mí, y el Todopoderoso me ha afligido?”
No siempre las cosas que parecen buenas lo son, ni tampoco las que parecen malas son lo que parecen. No tomes decisiones a la ligera. Déjate guiar por Jesucristo y su santo espíritu. Ruth tomo una buena decisión. V 16-17 “Respondió Rut: No me ruegues que te deje, y me aparte de ti; porque a dondequiera que tú fueres, iré yo, y dondequiera que vivieres, viviré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios mi Dios. 1:17 Donde tú murieres, moriré yo, y allí seré sepultada; así me haga Jehová, y aun me añada, que sólo la muerte hará separación entre nosotras dos.”
Muchas veces entramos a la vida cristiana con grandes expectativas de mejoramiento en nuestra condición de vida. Pero cuando más alegres estamos muchas veces nos suceden cosas desagradables que nos hacen tomar decisiones equivocadas. Muchos se desaniman y terminan desertando de la iglesia.
Nunca es tarde para volver a empezar, es de valientes aceptar sus errores para corregir y tomar una nueva decisión. Mira en que estas fallando como esposo(a) como hijo, como cristiano et. Y esfuérzate por corregir tus errores. Noemí reconsidero lo que había hecho y tomo una decisión acertada. ¡Volver a su tierra! V 22 “Así volvió Noemí, y Rut la moabita su nuera con ella; volvió de los campos de Moab, y llegaron a Belén al comienzo de la siega de la cebada.”
Antes de tomar una decisión.
1. Primero analiza que puedes ganar o perder con lo que vas hacer.
2. Espera siempre en Jesucristo. Él nunca llega tarde.
3. No dejes que las circunstancias te motiven a tomar la decisión. Recuerda que nuestras emociones nos pueden confundir.
Si este día tienes que tomar decisiones sobre tu vida es mejor que te tomes tu tiempo y lo consultes con el espíritu santo, él es nuestro ayudador, él te dirá que debes hacer, los medios que el utiliza para comunicarte lo que tienes que hacer son diversos, mantente alerta para escuchar sus voz.